Cumpla sus promesas.
Si dice a sus clientes que va a hacer algo, asegúrese de cumplirlo. Ya se trate de una fecha de entrega, un precio de venta o una característica del producto, si dice que lo va a hacer, asegúrese de que lo hace.
Sea receptivo.
Los clientes deben poder ponerse en contacto con usted cuando lo necesiten. Asegúrese de que sus líneas telefónicas están abiertas y de que hay alguien disponible para responder a sus preguntas. También debe responder puntualmente a los correos electrónicos y otros mensajes.
Sea servicial.
Sus clientes deben sentir que quiere ayudarles, no solo venderles algo. Cuando tengan preguntas, dedique tiempo a responderlas con detalle. Si hay un problema, colabore con el cliente para encontrar una solución.
Muestre aprecio.
Haga saber a sus clientes que aprecia su negocio. Envíeles notas de agradecimiento, obténgales descuentos en su próxima compra u ofrézcales otras ventajas, como envíos gratuitos o acceso anticipado a nuevos productos.
Pida opiniones.
Asegúrese de pedir constantemente la opinión de sus clientes y de utilizarla para mejorar su negocio. Envíe encuestas, organice grupos de discusión o simplemente pregunte a los clientes qué opinan de sus productos y servicios